martes, 28 de junio de 2011

si tienen tanto empeño en salvarnos, ojo, algo quieren...

cuando los políticos y asimilados hablan de europa se ponen supermoñas. que si la vieja europa, que si la venusina europa...
europa es el continente que se expandió por el mundo entero obligando al resto a someterse a su particular modo de vida, y lo hizo sobre todo por las malas. mejor dicho, siempre por las malas porque si después de invadirte, matarte y humillarte terminas aceptando lo que sea, ese lo que sea no ha sido libremente aceptado. 
y, si no, que se lo pregunten ahorita mismo a los griegos. o aceptan pulpo como animal de compañía o los sitian por hambre.
pero en qué cabeza cabe, que parecemos tontos, caray!, que los países fundadores de la unión europea, francia y alemania, estén interesados en unirse a un montón de países de morralla (mira por dónde inglaterra no forma parte de la unión monetaria), si no es para forrarse a su costa, o sea, a nuestra costa. 
y eso es lo que vienen haciendo desde que renunciamos a nuestra moneda particular y les hicimos el gran negocio a los alemanes. a los alemanes que mandan, quiero decir, porque la mayor parte de ellos también trabaja y son explotados a conciencia.
en este punto es cuando alguno que se considera enterado suelta lo de que a nosotros nos ha venido muy bien el dinero que nos ha dado europa. pues tampoco, oiga, nos han hecho carreteras para que circulen mejor y más deprisa todos los productos extranjeros que les estamos comprando. hemos renunciado a muchas cosas para formar parte de la vieja europa, nos han hecho totalmente dependientes de ellos y lo que hemos alcanzado es que los que antes éramos subdesarrollados ahora seamos PIGGS. tiene narices la cosa...
así que, si ahora están tan empeñados en salvarnos, ojo, algo quieren. y claro que algo quieren, quieren salvar sus finanzas los viejos bancos de la vieja europa. dicen que es para salvarnos de la ruina pero... ¿y si  somos nosotros los que estamos salvándolos a ellos y esta tesitura creada por ellos a propósito es la oportunidad de hundirlos hasta que pidan clemencia y acepten nuestras exigencias?
ay! que me dejo llevar por el entusiasmo y me estoy poniendo muy nerviosa!!!!

domingo, 26 de junio de 2011


me gustan esos campos,
sacan no sé cómo mi alma al aire
para que se despeje y vuelen las polillas.
respiro
y se abren mis venas al olor de la tormenta,
provocando un regocijo casi insoportable...
y corro
y brinco
y lloro

viernes, 24 de junio de 2011

cosas que pasan (final)

Aquel día decidí su futuro, así de frívolamente lo hice. Quise que me contara sobre las mujeres interesadas en él, que yo sabía que no eran pocas porque se trataba de un hombre agradable y rico. Le pregunté detalles de ellas, edad, trabajo, condiciones de vida, aspecto físico... y escogí una. Le di las instrucciones necesarias para salir con la elegida, modos de cortejarla, de enamorarla, tiempos de cada etapa de su noviazgo, reacciones que debía tener según el caso que se les diera, salidas airosas cuando algo se torciera...

Él me escuchaba sin quitar los ojos de mi cara y sólo me interrumpió en alguna ocasión para explicarme una circunstancia que yo no había entendido o para decirme, desalentado, que él no podía querer a otra aunque se lo mandara. Le aseguré que sí podría, le mandé hacerlo. Él temía decepcionarme y se comprometió a esforzarse. Finalmente le pedí que me prometiera seguir siendo mi amigo.

Al día siguiente salí de viaje y estuve fuera de España algo más de un mes. A mi vuelta nos vimos. Me preguntó noblemente por mi estancia en el extranjero y yo le respondí con anécdotas sobre ella. Entonces me acordé de nuestra última conversación. No es que la hubiera olvidado por completo pero dudaba mucho de que él se hubiera animado a llevar a cabo mis planes. Sin embargo, lo había hecho. Según mis instrucciones, había llamado a aquella chica, habían salido varias veces, la había enamorado, se habían entendido sexualmente y había cumplido fielmente todas las cláusulas del plan.

Me quedé estupefacta. Él me contaba aquello como un niño enseña las buenas notas a
su madre, orgulloso, deseoso de que yo lo felicitara y aprobara su obediencia y fidelidad a mí.

Pero algo me pasó, el horror de mi manipulación se me apareció con su fea cara, sentí un vértigo inédito para mí, peor aún, me di cuenta de que no podía deshacer el camino recorrido.

Temblando le pregunté si era feliz, si estaba contento. Dijo que sí, quería convencerme de que había hecho todo lo mandado con convicción, con entusiasmo. Me lo ofrecía a mí. Yo no podía sostenerme, lo único que me mantenía aún en pié era el pensamiento recurrente de que todo aquello había resultado bueno para él. De que mi comportamiento abominable en realidad podía hacer posible algo beneficioso. No quería ni pensar en aquella chica cuya vida yo había delineado sobre el mantel de un restaurante un domingo sin nada que hacer. Me avergonzaba tanto de mí misma que no supe mantener el tipo cuando me preguntó, a su vez, por mi propio novio.

Respondí sinceramente que no existía. Al principio él no entendió bien. ¿nos habíamos peleado? ¿estaba fuera? No, le contesté, nunca existió. Lo inventé para que tú dejaras de pensar en mí.

Me miró desconcertado, sonrió con una mueca y se marchó sin despedirse. Fue la última vez que hablé con él.

A partir de entonces nos hemos cruzado en varias ocasiones y siempre me ha esquivado. Yo he intentado pararlo, explicarle, disculparme, lo que sea, pero no ha querido escucharme nunca. Si me ve llegar por algún sitio, cambia su ruta y desaparece. Si las circunstancias lo obligan a permanecer en el mismo lugar que yo, me da la espalda y me ignora.

Se casó con aquella chica y están esperando un niño. Sé que ella no sabe nada ni lo sabrá jamás porque esa fue una de las instrucciones que recibió de mí aquella tarde de verano, incluída la recomendación de que jamás le hablara de mi existencia, y las siguió al pié de la letra. Sé que me odia y yo sé que me lo merezco. Por otro lado, admiro su dignidad. Creo que creció con su dolor pero a él eso ya no le importa. A mí, sí.

martes, 21 de junio de 2011

cosas que pasan (1ª parte)

Pasan esas cosas, pasan. Por lo menos a mí. Conocía a ese hombre desde hacía varios años y siempre, desde el principio, él confesó su atracción por mí y su adhesión a mi persona. No hace falta que explique que yo no veía plenamente justificado su entusiasmo pero... bueno, a nadie le amarga un dulce.

La costumbre manda. Es así. La costumbre nos anima con cosas que nunca se nos hubiera ocurrido acometer, pero... la costumbre. Y yo me había ido acostumbrando a su compañía, a su ayuda, a sus invitaciones, a que se satisfaciera cualquier ocurrencia que me pasaba por la cabeza. Él insistía en que le pidiera lo que se me antojara, todo capricho que me apeteciera. Y yo empecé a hacerlo.

Un día, su presencia, ya frecuente, y su adoración empezaron a pesarme. No sé si fue por ello por lo que comencé a plantearme mi comportamiento, pero el caso es que intenté deshacer el camino recorrido. Naturalmente mi intento fue un fracaso. Es más fácil no dar un paso que desandar un camino. Él lo sabía, en realidad esa había sido su estrategia. Sólo una psicópata es capaz de herir a alguien que sólo nos ha favorecido, sin mediar provocación alguna. Y yo no era una psicópata. Había sido comodona e irreflexiva pero lo cierto es que había empezado a tenerle cariño y a sentir verdadera amistad por él. Por eso intenté cortar, para darle una oportunidad de ser feliz. O eso me conté a mí misma.

Se lo planteé una tarde, después de comer en un restaurante de un pueblo a casi cien km de madrid, un lugar de cocina sofisticada, de vinos muy ricos y de facturas astronómicas. Salió sin darme cuenta. Mientras él me miraba embelesado yo empecé a sentirme mal. No quería que me mirara así, quería que sintiera por mí sólo amistad, desigual quizá, pero sin expectativas. No creí que fuera a hacerle tanto daño, estaba tan acostumbrada a impedirle salirse del guión que yo había escrito para nuestra relación que su tristeza me cogió por sorpresa.

Se me ocurrió decirle que había conocido a un hombre que me gustaba mucho y que había empezado a salir con él. Quizá porque era mentira no tuve la consideración de pensar en su dolor. Me preguntó si era verdad y yo insistí en que sí pero empezando a darme cuenta de que quizá no había sido una buena idea. De sus ojos empezaron a brotar lágrimas silenciosas que no conseguía ocultar. Por primera vez sospeché la intensidad de su amor por mí. Sentí un mordisco de remordimiento pero lo acallé con mi parloteo y con la justificación de que lo hacía por él.

Le expliqué que era lo mejor que le podía pasar porque de esta manera sería capaz de olvidarme, y que él tenía que olvidarme porque tenía una vida por vivir, en plenitud, sin reservas, con amor correspondido. Le reiteré que yo nunca podría hacerlo. No dijo una palabra. calló para recibir mis órdenes y obedecerme, como había estado haciendo durante años. Ahora sé que me escuchó y grabó en su cabeza cada palabra que dije, todas y cada una de mis indicaciones. 
Todas menos una.

lunes, 20 de junio de 2011

sábado, 18 de junio de 2011

yo no acierto casi nunca. tengo buena voluntad pero escasa puntería. sobre todo con lo que tiene que ver con la reacción de la gente. 

a veces creo que la gente es una especie de paquidermo moroso y adormilado al que pueden maltratar cuanto quieran que no van a despertar su rebeldía y cuando ésta se manifiesta es más del tipo autodestructiva, dejándose morir o resistiéndose a la reproducción o arrojándose a un suicidio colectivo.

sin embargo, también paquidérmicamente, la gente a veces parece no olvidar los agravios, sino  que los va acumulando en una suma misteriosa y lenta que alcanza el punto de rebosamiento de manera inesperada.

no conozco la dinámica social que pasa de la indiferencia y la mansedumbre a la irritación y la rebeldía. 

la españa pastueña tampoco. quizá por eso está tan inquieta y lleva días calentando a los medios de comunicación y siendo calentada por éstos. o sea, preparando el 19-j.

casi nadie mayor de 30 años entiende un pimiento del movimiento 15m. es otra forma de luchar, de oponerse, de reaccionar... son distintos de los mayores porque han tenido padres, educación y experiencias distintos de los nuestros. su lucha no es como la de los años 70 porque su enemigo, siendo el mismo, se ha transformado. 
el mundo se ha transformado. los opinantes oficiales del reino ensayan vaticinios que no se creen ni ellos. saben que algo se les escapa pero ni idea de qué ni de cómo atajarlo. pp y psoe se comportan como marquesas ultrajadas en su peinado por una ráfaga de aire irreverente. qué barbaridad! vaya modales!

están viendo que algo inconcreto se les viene encima y como no lo entienden se ponen muy nerviosos, y como se ponen muy nerviosos se vuelven violentos. y como se ponen muy violentos seguramente mañana nos van a forrar a hostias.


jueves, 16 de junio de 2011

y se quejan porque los pintan

y digo yo, ¿por qué no se puede echar un poco de pintura a un político por encima si ellos nos están 
enterrando, literalmente, bajo capas y capas de ladrillos, de contaminación, de miseria y de locura?

ya sé que todos estos desastres no son responsabilidad directa de los que sufrieron la capita de pintura, pero sí de responsabilidad compartida.

sólo para que no se nos olvide, nosotros les pagamos. y lo hacemos porque en determinado momento presentan un programa electoral que nos gusta, y no otro sino ese programa, y los elegimos para que lo lleven a cabo. y si ellos, cuando intentan ponerlo en práctica, si es que lo intentan, vamos a suponer que sí, se dan cuenta de que no pueden hacerlo, o no saben o no les dejan o lo que sea, lo que tienen que hacer es devolver sus actas al pueblo y que éste decida si elige a otro para que lo haga o si cambia de programa, pero lo que no pueden legítimamente hacer es decidir por su cuenta lo contrario de aquello para lo que fueron elegidos y que perjudica grave y dramáticamente a los ciudadanos. yo creo que se entiende sin dificultad, no?

entonces no sé a qué viene tanto jaleo y tanto parloteo porque a unos diputados catalanes les hayan echado pintura, que ya sé que es humillante, pero las listas del paro o la pobreza lo son más. 

los políticos son nuestros representantes y se deben a nosotros y no al capital. ya sabemos que los banqueros son los responsables de las crisis pero, ante nosotros, la responsabilidad la tiene quien les deja hacerlo, quien nos pone en sus manos para que hagan ingeniería financiera a nuestra costa. y además, sacan buen provecho. 

si hubieran tenido vergüenza se habrían ido sin necesidad de pintarlos.

martes, 14 de junio de 2011

me encanta la novela negra. y no es de ahora. 
de jovencita descubrí a simenon, y su maigret me ha acompañado siempre. reconozco que desde que leí su autobiografía se me vino al suelo el escritor, qué infame resulta, pero da igual... maigret era ....
una vez recorrí en parís los lugares que el comisario frecuentaba, su casa, en el bulevar richard lenoir, su lugar de trabajo, en el quai des orfevres, la brasserie dauphine... 
también me ha pasado con el padre brown y plinio, holmes, spade y marlowe, parker y dortmunder, wallander, bevilacqua, chamorro...
encuentro en los detectives la sabiduría del que conoce el mundo y su perversidad y lo comprende. al que trabaja mucho y duro y gana muy poco. al ser humano cuyos ojos ya no pueden contener la visión horrible de los muertos, al que sabe que, aún cuando gane y resuelva un caso, pierde. 
son gente llena de cicatrices, con frecuencia adictos al alcohol o a drogas. 
solos. 
y bellos, porque sólo la derrota y el fracaso contienen belleza, contención, dignidad, enseñanzas y aspereza. 
la victoria, al contrario es lisa, brillante, hortera, estridente y ensimismada, ni enseña ni aprende. fea.

mis detectives han aprendido mucho, no se afeitan ni se duchan a menudo, beben más de la cuenta y hasta miran inútilmente a las mujeres con lascivia. pero han aprendido mucho.
me quedo con el matiz.

domingo, 12 de junio de 2011

arrepentimiento

el arrepentimiento 
o el mordisco de un perro a una piedra
 
vertió la leche sobre el suelo,
como se extiende un blanco
mantel sobre la mesa, 
y sus  negros ojos gigantescos
se abrieron con espanto
ante el descubrimiento
de que no es posible recogerla.

viernes, 10 de junio de 2011

riña de gatos

qué genial la gente que mira a los mortales y los ve allá abajo, tan chiquitines, tan imperfectos, tan afanados, pobrecitos, en sus miserias de tres al cuarto.
y qué elegantes también, ¿no? porque podrían ponerse groseros como los demás, perder los nervios y ofuscarse, pero no, ellos no pierden la sonrisa ni la calma. pasan sobre nosotros pero ni nos rozan. deben de sentir mucha lástima viéndonos furiosos, desesperados, desanimados y violentos.
yo estoy aprendiendo muchísimo de estos seres superiores, quiero ser como ellos, tomar distancia con la grosería del vulgo y, si puedo, mostrarle su espíritu limitado con mi fina ironía.

mi maestro es eduardo mendoza desde que leí el otro día su riña de gatos. o sea, nuestra riña de gatos, porque con este desprecio se refiere el insigne novelista a los albores de la guerra civil en madrid, como a una peleas de borrachos o trifulcas de mamarrachos dominados por bajas pasiones.

la distancia del novelista con respecto a lo que narra, el golpe y su consecuencia, en realidad es más bien ficticia porque nació en 1943, o sea, que el franquismo él lo pilló fresquito, pero de todas formas lo intenta. 

su protagonista es un inglés que se dedica al arte y que se pasea por madrid entre izquierdistas vendidos a la urss, adolescentes que se prostituyen para mantener a sus escuálidas criaturas y de quien el inglés no duda en aprovecharse, aristócratas deliciosos con quienes pasa sus mejores ratos, y falangistas como josé antonio primo de rivera, hombre valiente, enamorado e ingenioso. 

muchas veces me he preguntado cómo hacen los hijos de los fascistas y asimilados para enfrentarse a hechos incontrovertibles como que sus papás eran unos canallas y se portaron como tales.  
pues haciéndose el inglés, oye.

miércoles, 8 de junio de 2011

pocas veces siento de veras la muerte de alguien a quien no me unen lazos personales. me ha pasado con semprún. 
tengo respeto por ese hombre que pudo haber llevado una vida de rico y de parásito y que no lo hizo porque su dignidad y su conciencia no se lo permitieron.
era nieto de antonio maura, presidente de gobierno con alfonso xiii, sobrino de un montón de tíos y tías, primos, amistades y demás familia, todos ellos forrados de dinero, y, sin embargo, jorge semprún salió de españa con 12 años para engrosar las filas de exiliados causadas por el golpe del 36.
tengo respeto a ese hombre por su compromiso ético con la verdad y la justicia, por su valor personal, por su talento y su coherencia.
españa da asco, me alegro de que lo entierren en parís. si estuviera allí le llevaría flores.

domingo, 5 de junio de 2011

tengo una amiga...

tengo una amiga cuyas hijas, dos, están en tratamiento psiquiátrico.
tengo una amiga cuyos hijos, dos, no le hablan.
tengo una amiga, casada, que no folla desde hace 26 años.
tengo una amiga cuyas noches son enemigos que la consumen.
tengo una amiga cuya mejor amiga es una copa de vino.
tengo una amiga cuyos amantes no saben por qué llora en el orgasmo.
tengo una amiga que no sabía que su marido abusaba de su hija.
tengo una amiga cuya belleza la mantiene al servicio de los hombres.
tengo una amiga que cuidó a la esposa de su amante durante una larguísima enfermedad.
tengo una amiga que se dejó cuidar, agradecida, por la amante de su marido.

tengo una amiga....

jueves, 2 de junio de 2011

la puerta por la que entra el sol

lo de la puerta del sol y todas las puertas del sol, qué hermoso y apropiado nombre para un lugar de renovación y renacimiento, no es un chaparrón, ni tampoco un vendaval. yo creo que es una suerte de lluvia fina y calaciudadanos que se va infiltrando en la psicología social.

el resultado de las municipales no ha reflejado el sentimiento social. en primer lugar porque ha votado aproximadamente la mitad de la gente que podía hacerlo, el psoe no merecía otra cosa, y en segundo porque mayoritariamente lo ha hecho el votante pepero. y han ganado, claro.

cuando dentro de unos meses se celebren elecciones generales y gane la derecha, !esta derecha española, dios mío!! y empiece a implantar las medidas económicamente liberales y socialmente retrógradas que van a implantar porque para algo quieren gobernar, la gente, empapada según mi deseo, de indignación, levantará la cabeza insurrecta y saldrá masivamente a la calle. hala.