miércoles, 3 de abril de 2013

cabalgar al tigre


decían los chinos de antaño que la única manera de dominar a un tigre y evitar que nos mate es cabalgarlo.

la situación económica y social actual es el resultado lógico de haberse creído semejante estupidez. seguramente los chinos lo decían porque sabían que los cletinos eulopeos se la iban a creer. ellos, no.

al menos, se la han creído los gobernantes mediocres y sanchopancistas de todos los países de la órbita capitalista que decidieron hace mucho que tapándose la cabeza y diciendo no toy, la tormenta quedaba conjurada. y no, ni de coña.

el capitalismo es un tigre de los más gordos y feroces que existen, cuya naturaleza es la de la explotación de los seres humanos y cuya tendencia es la del zarpazo mortal.

encima de tal animal se encarama un ejemplar de la especie humana que se cree sus propias mentiras, esas que nos cuentan cuando nos dicen que hay un capitalismo de rostro humano, ja! y sólo porque el gran felino está hartándose de comer en algún lugar del globo (áfrica en su momento, hispanoamérica, asia... en los suyos), se deja cabalgar por el individuo que lo conduce a esos abrevaderos.

mas... ay! no hay nadie que domine al tigre. cuando la fiera lo decide porque las víctimas clásicas van escaseando... se sacude al jinete y se lo come, y, una vez catada la sangre del humano europeo, orondo y acomodado, cuestan muchas víctimas volver a sosegarlo.

el tigre no debe cabalgarse, hay que liquidarlo cuando todavía está medio obnubilado, pero si lo crías, lo engordas, lo encaprichas... ten por seguro que te devorará.