los del 15-m tienen una enorme capacidad de convocatoria, y la tienen porque son jóvenes.
no hay otra explicación.
hasta ahora no han demostrado nada, no llevan un largo recorrido, no han trazado trayectoria alguna y ni siquiera tienen planes concretos... pero son jóvenes. y esto nos basta.
y supongo que nos basta porque la condición de joven implica inocencia, generosidad, corazón y empuje. justo lo que nos estaba haciendo falta.
no nos creemos ya a los sindicatos, ni a los políticos, ni a los intelectuales, ni a los presidentes negros, pero a los jóvenes, sí. ¿decía arriba que no han demostrado nada? error, han demostrado fuerza.
así que pueden seguir interrogándose a sí mismos los que se irritan con este movimiento con las mismas estúpidas e irrelevantes cuestiones de "¿qué quieren estos?, ¿quién los manda?, ¿qué planes tienen?"
si no entienden que la vocación de la juventud es hacer mejor el mundo, no van a entender cuestiones más arduas. no van a entender, por ejemplo, que lo que pasa es que hemos tenido narcotizados a nuestros jóvenes durante mucho tiempo a fuerza de sobreabundancia en todos los sentidos, y ellos han respondido de forma adecuada a la situación en que se encontraban. o sea, pasando.
pero las condiciones han cambiado y, como saben todos los teóricos marxistas, son las condiciones las que marcan los cambios. ni hay generaciones mejores ni peores. hay generaciones con condiciones diferentes y por lo tanto, con respuestas diferentes.
pues bien, esta vez las condiciones no pueden ignorarse porque son de las que echan a la calle y hacen pasar hambre y ante eso espabila el más pintado.
imagino que el poder económico (¿hay otro?) creía que los jóvenes no estaban sólamente narcotizados sino muertos, y se han equivocado. pensaban que eran frutos que se pudrirían antes de madurar, que pasarían de verdes a podridos.
pero se ve que no...
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